SCP-ES-174

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Fotografía personal de SCP-ES-174

Procedimientos Especiales de Contención: SCP-ES-174-A debe permanecer en una celda de contención humanoide modelo B-3NJ v4, con acceso a una librería digital rotativa semanal.

SCP-ES-174-A tiene prohibido el acceso al papel, y todas las instancias de SCP-ES-174-C deben ser almacenadas en una caja fuerte segura en el Ala de Objetos Anómalos de Bajo Valor de la Instalación-20.

SCP-ES-174-B debe ser almacenado en una caja fuerte segura en el Ala de Objetos Anómalos de Medio Valor de la Instalación-20.

El uso de SCP-ES-174-C en pruebas a largo plazo están prohibidas.

Descripción: SCP-ES-174-A es Arsenio "Colilla" Álvarez, un antiguo miembro de los Chicago Rum Runners1. A pesar de aparentar aproximadamente 20 años, los registros y evidencias históricas apuntan a actividad en Cuba desde al menos el 12 de Mayo de 1925. SCP-ES-174-A es el único capaz de recargar a SCP-ES-174-B.

SCP-ES-174-B es una pistola 9mm modificada con un mango transparente y la entrada del cargador sellada. Cuando SCP-ES-174-A logra llevar a cabo un Evento Asalto con éxito, en el interior del mango se manifiesta una cantidad indeterminada de líquido azul. Siempre y cuando este líquido se encuentre dentro de la pistola será capaz de ser disparada, aunque no se han determinado los efectos de disparar a SCP-ES-174-A.

SCP-ES-174-C son todas las formas de papel enrolladas por SCP-ES-174-A. Cuando SCP-ES-174-A dispara SCP-ES-174-B a una instancia de SCP-ES-174-C, el papel se quema con un fuego de color azul, y el rollo es instantáneamente rellenado con pulpa de celulosa. Los sujetos que han fumado SCP-ES-174-C expresan sentirse "llenos" y "un poco más felices".

Se define como Evento Asalto al momento en que SCP-ES-174-A, portando a SCP-ES-174-B, amenaza a un sujeto con 'hacerle daño si no le entrega su felicidad'. Si la respuesta es positiva, SCP-ES-174-A disparará el arma, con resultados variados (ver Anexo A). Las pruebas con cámaras de alta velocidad han demostrado que al jalar el gatillo el lugar del cuerpo del sujeto que esté siendo apuntando excreta una sustancia líquida azul que ingresa a la pistola y luego al cargador a una velocidad aproximada de 340m/s.


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Lo siguiente es una recopilación de registros catalogados por el Departamento de Crímenes Anómalos de La Fundación SCP que tienen relación con SCP-ES-174. Nótese que algunos de los documentos han sido modificados para corregir errores de ortografía, gramática, y eliminar modismos.


Caso 255: Ojos Tristes


Víctima: Gonzalo Videla

Fecha: 12 de Mayo, 1925

Ubicación: Calzada de Guanabacoa, La Habana, Cuba

Tipo: Robo a Mano Armada

Encubrimiento: Robo con Agresión

Detalles: Fue encontrado deambulando cerca de la estación de Policía Nacional Revolucionaria 24. Cuando un oficial se le acercó, afirmó tener la intención de hacer una denuncia. Tramitado de acuerdo a la legislación en vigencia, la víctima aseguró haber sido amenazado por un sujeto con una pistola que brillaba de color azul. La amenaza consistía en la entrega de toda su felicidad a cambio de seguir viviendo. Cuando la víctima aceptó, el sujeto le disparó en el ojo.

La víctima asegura que, desde entonces, no ha podido parar de llorar y tener grandes sentimientos de tristeza y melancolía. Tramitado como daños psicológicos y exageraciones normales pos-robo.

La víctima se suicidó una semana después. Diversas entrevistas y registros mencionan que la víctima, a pesar de antes del robo demostrar mucha felicidad por el nacimiento de su hijo, lloraba constantemente y afirmaba ser incapaz de volver a ser feliz.


Caso 327: Ojeras Gruesas


Víctima: Elionora Cortés

Fecha: 29 de Mayo, 1925

Ubicación: Avenida de Jefferson, La Habana, Cuba

Tipo: Robo a Mano Armada

Encubrimiento: Robo con Agresión

Detalles: La dueña de un establecimiento de comercio minorista llamó a la policía local al afirmar que una cliente había estado sentada inmóvil fuera de su local por más de 9 horas seguidas. Cuando la policía llegó a escena, fueron incapaces de obtener respuesta de la víctima, pero pudieron encontrar que la víctima no pestañaba y que contaba con un hematoma en su brazo.

La dueña, en una entrevista con la policía, afirmó que la víctima había llegado eufórica hasta su local con un boleto ganador de la lotería, comprado allí mismo. Poco después de explicarle el procedimiento a seguir para reclamar su premio, la víctima salió del establecimiento. La dueña afirma haber oído un fuerte sonido de impacto unos minutos después, que atribuyó al golpe de algún material en una construcción cercana.

La víctima, luego de algunos minutos del sonido, se sentó afuera del local, y permaneció en su estado actual. Se hizo un intento por introducirla en la patrulla, pero falleció poco después. Más tarde se determinó la causa de muerte como desangramiento por hemorragia interna al ceder algunos de los ligamentos de su rodilla. El boleto de la lotería fue encontrado en el bolsillo de su vestido.

"Es una pena lo de la señora Elionora. Ella era una mujer solitaria, ¿sabe, usted? Los hijos nunca les fueron muy apegados y el marido se había ido hace mucho. Venía a mi almacén todos los días a por el pan. La única vez que la vi feliz fue hoy en la tarde con lo de la lotería. Decía que por fin se iba a poder operar la artritis e ir a ver a sus hijos" - María Carmen, dueña del establecimiento.


Caso 413: Naranja Partida


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Fotografía Adjunta

Víctima: Jorgen Luis

Fecha: 25 de Junio, 1925

Ubicación: Calle 296, Artemisa, Cuba

Tipo: Robo a Mano Armada

Encubrimiento: Robo con Agresión y Ebriedad

Detalles: Fue encontrado sucio y deambulando torpemente. Un miembro del Depto. de Crímenes Anómalos infiltrado en la policía local, el Agente Eduardo, lo detuvo por presunto estado de ebriedad. La víctima no poseía sus documentos de civil. El agente, durante la prueba de alcohol inicial, notó similitudes con los Casos 327 y 255 y decidió llevar a cabo una entrevista en el lugar.

La víctima mencionaba ser un sin techo2 y que se encontraba buscando a su esposa, Lirio Azul3, desde hace seis días, a quien no había visto luego de ser asaltado por un individuo que, asegura, le disparó en el pecho.

La víctima fue capaz de proporcionar la dirección en la que se encontraba el colchón donde él y su esposa solían 'residir'. La víctima fue tramitada por estado de ebriedad, y se le alojó temporalmente en una celda en la estación de policía más cercana. Mientras tanto, el agente fue a la dirección proporcionada, donde encontró a la esposa de la víctima.

Cuando el agente reunió a la víctima con su esposa, la mujer lo abrazó, pero la víctima era incapaz de reconocer la presencia de la mujer y se quejó por 'la broma de mal gusto'. Ambos fueron detenidos en la misma celda. Mientras el agente solicitaba instrucciones para contener a una posible anomalía, la víctima se quejó de un agudo dolor en el pecho, y poco después cayó al suelo. Su posterior análisis determinó que había sufrido una disfunción apical transitoria, y murió camino al hospital.

"Éramos todo lo que teníamos. Él era la única razón por la que seguía despertando todos los días en ese asqueroso colchón. Él decía que me amaba, que lo era todo para él, su única felicidad. Y luego ocurre todo esto. No lo entiendo, y no quiero vivir como para entenderlo" - 'Lirio Azul', sobre el fallecimiento de su esposo.

La lista completa de los casos asociados a SCP-ES-174 está disponible para todos los miembros del Departamento de Crímenes Anómalos aquí.


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Si bien se conoce la existencia de SCP-ES-174 desde el 12 de Mayo de 1925, la falta de vigilancia, información y personal en el área debido a las complicaciones de las actividades de La Fundación en Cuba y sus alrededores impidió que fuera contenido hasta el 27/5/1957, cerca de las costas de Presqu'ile du Môle, Haití, cuando el SCPS Boukman reportó a la Instalación-20 el avistamiento de humo en medio del mar. Cuando el personal de La Fundación se acercó al lugar, descubrieron un pequeño submarino a pedales incendiándose y a un individuo encima intentando huir nadando. El fuego fue extinguido, el submarino decomisionado y el individuo, más tarde denominado como SCP-ES-174, fue enviado a una celda de contención humanoide temporal dentro del SCP Boukman.

Dentro del submarino se encontraron 50 bolsas de 400 ml que contenían un líquido azul previamente desconocido, 500 hojas de papel tamaño oficio, SCP-ES-174-B, una cajetilla de cigarros, y dos encendedores.

SCP-ES-174-A se negó a hablar durante su contención temporal. SCP-ES-174 fue transportado hasta la Instalación-20 en Haití, donde se establecieron los procedimientos de contención actuales.


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Lo siguiente es la primera entrevistada realizada a SCP-ES-174-A, llevada a cabo 2 semanas después de su contención inicial.

Entrevistador: Investigador Hungan Deveaux

Entrevistado: SCP-ES-174-A


[INICIO DEL REGISTRO]


Dr. Hungan: Buenos días, SCP-ES-174-A.

(SCP-ES-174-A, de brazos cruzados y sentado en su silla, observa inmóvil al Dr. Hungan)

Dr. Hungan: No hay respuesta, ¿eh?

(SCP-ES-174-A permanece en silencio)

Dr. Hungan: Si. Sé que no debe ser divertido para ti pasar por esto todos los días (Pausa) Y más de una vez. Para mi tampoco lo sería.

(Pausa)

Dr. Hungan: Bueno, como habrás notado, no soy Delu. Ella se ha tomado el día, así que por esta ocasión han decidido traerme a mi contigo. Y yo—

(El Dr. Hungan saca un cigarrillo del bolsillo de su camisa y lo pone en su boca. Poco después, saca un encendedor del mismo bolsillo, enciende el cigarro, y regresa el encendedor a su bolsillo).

(El Dr. Hungan pone los pies sobre la mesa, inhala, y luego exhala humo del cigarro)

Dr. Hungan: —yo no soy nada como Delu.

(Pausa)

Dr. Hungan: No hay respuesta, ¿eh? ¿Y qué tal si hago esto?

(El Dr. Hungan pone una bolsa grande de papel sobre la mesa. Mete la mano dentro y saca una bolsa con líquido azul, que luego tira sobre la mesa)

Dr. Hungan: Tiene un color muy bonito.

(SCP-ES-174-A mira a la bolsa por dos segundos, y luego continúa mirando al Dr. Hungan)

Dr. Hungan: (Sonríe) Las extrañas, ¿no es así?

(El Dr. Hungan rompe la bolsa con sus manos y la tira al suelo. SCP-ES-174-A se levanta de su silla rápidamente y observa el líquido azul en el suelo. El Dr. Hungan saca otra bolsa)

Dr. Hungan: Tengo varias aquí. Puedo devolvértelas todas y tu pretencioso encendedor con forma de pistola si de una vez por todas te dejas de jugar al cementerio y comienzas a hacer bailar tu puto hocico, pedazo de mierda.

(SCP-ES-174-A asiente con la cabeza)

Dr. Hungan: Bien. Ahora quiero que te sientes

(SCP-ES-174-A da un paso hacia adelante. El Dr. Hungan rompe otra bolsa y la lanza contra la pared)

Dr. Hungan: ¡Que te sientes, mierda!

(SCP-ES-174-A se sienta rápidamente)

Dr. Hungan: Bien, bien. (Exhala e inhala el humo de su cigarro). Así me gusta

SCP-ES-174-A: ¿Qué es lo que quieren de mi?

Dr. Hungan: ¿Oh? ¡Sabe hablar! ¿Y qué quiero? Quiero no volver a tener que verte la cara de pendejo que tienes y volver a mis malditos asuntos, pero para eso primero necesito que me respondas unas preguntas

SCP-ES-174-A: No soy un sopl—

(El Dr. Hungan toma una bolsa)

SCP-ES-174-A: ¡Está bien! ¡Está bien! Hablaré… (Suspirando). Dios.

Dr. Hungan: Bien. ¿Qué hacías en ese submarino?

SCP-ES-174-A: Estaba pescando.

(El Dr. Hungan acerca su mano a la bolsa)

SCP-ES-174-A: ¡Estaba haciendo contrabando! ¿Qué no es obvio? ¿No qué eran policías? Ya deja las bolsas en paz, anciano

Dr. Hungan: ¿Y qué estabas pasando de contrabando exactamente?

SCP-ES-174-A: Las bolsas. Sus contenidos. Eran para un cliente

Dr. Hungan: ¿Qué clase de cliente necesita tantas bolsas?

SCP-ES-174-A: Qué sé yo, yo solo hago el trabajo, idio—

(El Dr. Hungan acerca su mano a la bolsa)

SCP-ES-174-A: Solo hacía un trabajo, amigo. (En voz baja) Hijo de puta.

Dr. Hungan: ¿Y por qué tú solo? ¿No que pertenecías a los Chicago Rum Runners? Esa gente de mínimo algo de dinero y contactos debe tener como para poder contrabandear de verdad en algún barco con pintas de legal. (Alzando la voz) Hijo de puta.

SCP-ES-174-A: Es mercancía especial.

Dr. Hungan: Se puede enviar cien veces y en la mitad de tiempo lo que tú estabas intentando hacer en un viaje el triple de lento. ¿Crees que vas a venir aquí a mi casa a engañarme? Pues no, idiota, estás hablando con Hungan, y a mi leer a los de tu tipo me es droga de niños. ¿De quién estabas huyendo?

SCP-ES-174-A: (Pausa) De todo el mundo

Dr. Hungan: Ya comienzas a entender, ¿eh? Continúa

SCP-ES-174-A: Las… cosas no están tan fáciles en La Habana, en La Que Tiene Libertad. Los Rum Runners han estado alborotados desde que El Espíritu colapsó en gringolandia. Milagrosamente no han sido lo suficiente cabeza duras como para auto-destruirse en todos estos años, pero parece que finalmente está ocurriendo. Rencor, disputas, peleas, asesinatos. Todos en casa y contra la familia. No había una puta noche donde pudiera dormir tranquilo ni una puta mañana en la que no tuviera que estar con el arma en mano mirando la puerta de mi casa. Dominábamos las calles, todas ellas, ¿y para qué? Para terminar volviéndolas hostiles contra nosotros de nuevo. Imbéciles, idiotas, mierdas. El pequeño submarino fue un premio que me habían dado hace tiempo por los años de servicio. Una noche me cansé de todo, salí a la calle, tomé los bienes de todos los tarados que me topé entre mi casa y la costa, metí todo al submarino y zarpé. Todo se jodió cuando descansando de pedalear se me cayó el encendedor. Luego me topé con ustedes, que ya no estoy tan seguro si son policías de verdad u otra mafia disfrazada.

Dr. Hungan: Ambas. Bien, eso explica porque te encontramos donde te encontramos, pero (El Dr. Hungan saca de la bolsa un fajo de papeles y los lanza sobre la mesa frente a SCP-ES-174-A. Inhala y exhala el humo de su cigarro). Pero no me explican esto.

SCP-ES-174-A: ¿Qué es todo esto?

Dr. Hungan: Las personas que sabemos que has asaltado

(SCP-ES-174-A toma varios papeles y los lee por treinta y siete segundos)

SCP-ES-174-A: Mierda

Dr. Hungan: Si, mierda

SCP-ES-174-A: No recordaba que fueran tantas, no sabía que acababan así

Dr. Hungan: Esos son solo los que me cayeron en la bolsa. En mi oficina tengo más, pero me temo que hoy no vinimos aquí a leer. Quiero que me digas que es lo que le has hecho a estas personas y por qué

SCP-ES-174-A: Yo… (Pausa) Necesidad.

Dr. Hungan: ¿Necesidad? Sus billeteras están intactas

SCP-ES-174-A: No, viejo idiota. No era por dinero. Es solo que yo… (Suspira) No lo he tenido fácil

Dr. Hungan: ¿Qué tan difícil?

SCP-ES-174-A: Bueno, nací en un hogar pobre, del útero de una madre que quería abortarme pero no tenía los medios, y de un padre que actuaba como si no existiéramos. Estuve en el orfanato toda mi niñez, teniendo que lidiar con el abuso de los otros tarados de los niños más grandes y de las putas monjas que de cristianas no tenían nada. Por defenderme, me gané un historial negativo, y ninguna familia quería adoptarme. Un día, comiendo el almuerzo, una pareja visitó el orfanato buscando a quien adoptar. Se dieron una vuelta por todo el comedor viendo y saludando a todos. Cuando llegaron hasta mi, el hombre se detuvo unos segundos. Yo me di la vuelta y me lo quedé mirando. Era mi padre, con otra mujer. Ninguna palabra, ninguna puta palabra oí salir de su boca. Solo miró a su mujer y siguieron viendo al resto. Esa tarde, adoptaron a un niño, y esa noche, escapé.

Dr. Hungan: ¿Y luego?

SCP-ES-174-A: Comencé a vivir por mi cuenta. Siempre fui bueno para robar y salirme con la mía, así que eso fue lo que hice. Me pasé así la vida hasta que un día me encontré a los de Chicago en mi callejón. Me dieron una oportunidad y la tomé. Desde entonces los robos ya no eran para comer o para beber, eran para un nuevo auto o una remodelación en mi casa. Fui uno de sus mejores ladrones, y ellos mi hogar.

SCP-ES-174-A: Con el tiempo, fui escalando peldaños, hasta llegar a las grandes ligas. Hice un viaje a Estados Unidos, a Chicago, a estar entre las ligas mayores un tiempo. Ellos me enseñaron sobre magia, y me enseñaron a esconderla de los hombres de negro. No fui el único en llegar allí, también habían varios amigos, así que me seguía sintiendo como en casa.

Dr. Hungan: Si estabas tan contento allá, ¿por qué volviste?

SCP-ES-174-A: Por trabajo, tuve que volver a Cuba. Me pusieron como matón y vigía en el barco. Todo bien, llegamos a tierra y me dieron unas horas para mí mismo. Recorrí los viejos barrios. No extrañaba mi antigua vida, ni esos días de mierda en la cárcel de menores que es el orfanato, pero no podía evitar sentir nostalgia al caminar por esos barrios.

SCP-ES-174-A: Podía recordar algunos de los momentos felices que viví ahí de niño, como aprender a andar en bicicleta y a enrollar el papel. Mi primer beso y mi primera mascota, una rata que se me subía al hombro y se llamaba Loro. Eran bonitos recuerdos, hasta que llegué a mi vieja casa. Pensé que estaría rota y vacía, pero no. Mi padre estaba dentro, aunque ya no estaba con esa mujer del orfanato, estaba con mi madre, y un niño, el que había adoptado. Estaban armando todos juntos el árbol de navidad.

SCP-ES-174-A: Recuerdo que mi madre le daba los adornos a los dos, el niño ponía los de abajo, y mi padre los de arriba. El niño quería poner adornos más arriba, pero era muy pequeño. Mi padre lo subía a sus hombros y lo ayudaba a decorar la zona superior. Cuando terminaron de armar el árbol, después de levantar al niño los dos para poner la estrella, se abrazaron entre los tres. No podía oírlo, pero estoy seguro de que mi padre dijo que los amaba.

SCP-ES-174-A: No pude evitarlo, y rompí a llorar. Mi padre me vio, a través de la ventana, y no reaccionó. Ni una sola reacción. Ninguna sonrisa, ningún remordimiento, sorpresa o enojo. Nada. Absolutamente nada. Para mi no había nada. Para mi nunca hay nada.

Dr. Hungan: Debió ser duro volver al barco habiendo visto eso, ¿eh?

SCP-ES-174-A: No volví después de eso. Tomé mi arma y les disparé. Entre por la ventana para seguir disparándoles. Tomé a mi padre del cuello de la camisa y lo golpeé con fuerza. Le grité, le grité hasta que me dolieron las cuerdas vocales que me dijera algo. Solo una palabra. Una puta palabra. Murió con la cara deformada, con una mirada vacía posada sobre mí, y en silencio.

SCP-ES-174-A: Tenía el corazón roto, y mucha ira. Verlo a él tan feliz gracias a mi ausencia. No era la vida que quería para mi. No quería vivir triste sabiendo que fui bastardo de un padre con vida. Quería un escape. Necesitaba escapar. Tomé algunos libros y modifiqué mi arma. Salí a la calle. Vi a unos niños jugando con el agua, riendo. Les apunté con el arma y les dije que si no me daban su felicidad los mataría. Dijeron que me la darían, y les disparé a los dos.

SCP-ES-174-A: No morirían, solo estarían tristes un tiempo y yo tendría mi felicidad. Disparé a uno de mis cigarros para encenderlo, y me senté en el suelo a esperar lo que sea que tuviera que venir a por mi. Fue allí cuando supe que si había funcionado. Fumé el cigarro y fui feliz. Me fui de allí y regresé a Estados Unidos.

SCP-ES-174-A: Al principio era simple. Un asalto, un disparo, yo era feliz. Pero con el tiempo, se me hacía más difícil olvidar todo. No me veía solo a mi feliz, si no que también comenzaba a ver a la gente que asaltaba feliz. Ver alegres momentos de sus vidas mientras yo todo lo que tenía para hacerme feliz era la fantasía de una familia que me amaba. Me servía para alejarme del silencio, pero ellos eran felices de verdad, yo no.

SCP-ES-174-A: Cuando no he tenido los cigarros, he deseado morir más de una vez, pero soy incapaz de hacerlo por mi mismo, y con el paso del tiempo dejé de envejecer. No estoy seguro de la razón. Castigo divino, tal vez. No lo sé. He pasado así mi vida desde entonces, solo viviendo.

(Pausa)

Dr. Hungan: Ah, ¿ya terminaste? Me estaba quedando dormido

SCP-ES-174-A: Qué hijo de puta. No debí contarte nada.

Dr. Hungan: (Ríe, inhala y exhala de su cigarro) Te entiendo. Tal vez pensarás, ¿qué dice este anciano senil? Si…

(El Dr. Hungan desabrocha cuatro botones de su camisa, dejando ver el tatuaje en su pecho de un cráneo de cerdo con dos subfusiles cruzados debajo y las letras 'Pig-Heads'4).

Dr. Hungan: Me metí en muchos problemas, y como tú, yo también soy fumador. Fumo porque me desestresa, porque me ayuda a conversar, y porque el humo me ayuda a no ver las mierdas que le hice a la gente antes de venir aquí. Yo también he hecho cosas malas, y he sido el villano en las historias de alguien más. Buena parte de mi vida sentí que solo vivía, vivía un día tras otro esperando el día en que finalmente me mataran, pensando que la gente a mi alrededor me recordará como alguien de la familia y lucharán el día de mañana pensando en mi. Era un error. Esa gente que por mucho tiempo llamé mi familia solo eran personas que tenían tanto dolor como yo, o personas que buscaban aprovecharse de nuestro estado.

Dr. Hungan: No fue hasta que alguien confío en mi, de verdad, que mi vida comenzó a tener algo de sentido. Y luego cuando yo mismo comencé a confiar en mi, fue que cambié. Dejé las calles y me convertí en lo que realmente siempre quise ser. Alguien que en vida se ha mantenido luchando por hacer de este mundo algo mejor, y alguien que cuando muera, el mundo realmente lamentará su perdida y extrañará su presencia. No el mundo como planeta, si no que el mundo que he forjado aquí adentro. Mi amigos, mi familia. El mundo que hace que mis propios buenos recuerdos sean el humo que me permita olvidar los malos momentos.

(Pausa)

Dr. Hungan: Cómo sea, ya estoy viejo y me pongo a dar la lata. (El Dr. Hungan se levanta, y entrega la bolsa a SCP-ES-174-A). Un trato es un trato. Hay 10 bolsas azules allí dentro. Tienes papeles tirados por toda la mesa. (El Dr. Hungan saca a SCP-ES-174-B del bolsillo de su pantalón y lo deja en la mesa) Y aquí tienes tu encendedor. Ya podrás ser feliz de nuevo.

(El Dr. Hungan camina hasta la puerta de la sala de entrevistas. Abre la puerta, y comienza a pasar por el umbral. Antes de cerrarla, es interrumpido)

SCP-ES-174-A: Doctor Hungan.

Dr. Hungan: ¿Si?

SCP-ES-174-A: ¿Me va a dejar aquí fumando solo? ¿No sabe que eso es de mala educación?

Dr. Hungan: No fumo anomalías.

SCP-ES-174-A: Nadie habló de anomalías. (SCP-ES-174-A alza en su mano un paquete de cigarros mientras sonríe)

Dr. Hungan: (Se revisa los bolsillos. Están vacíos) Qué hijo de puta (Sonríe, y se sienta junto a SCP-ES-174-A).


[FIN DEL REGISTRO]


Nota: Dadas las graves faltas al código de interrogación, el estado del Dr. Hungan como entrevistador está siendo evaluado, y se le ha prohibido acercarse nuevamente a SCP-ES-174-A.

Actualización 12/6/1957: El Dr. Hungan ha sido degradado de todas sus obligaciones como entrevistador, permitiéndosele solamente participar en pruebas SCP que no requieran de mayor interacción social.

Actualización 13/6/1957: Dado el gran incremento de la cooperación de SCP-ES-174-A después de su entrevista con el Dr. Hungan, el Comité de Ética ha decidido que ambos sujetos puedan volver a verse cada dos semanas.

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