La Fundación SCP

Fig 1.1: Tejido de piel recuperado de la cabeza de un Apóstol Gris (Eschrichtius apostoli).

PROCEDIMIENTOS ESPECIALES DE CONTENCIÓN: Una zona de exclusión de 5 km rodea a SCP-7900. Equipos de reconocimiento realizan patrullas diarias en las aguas circundantes.

El acceso a la red subterránea debajo de SCP-7900 está limitado al personal entrenado en navegación de espacios anómalos. Las exploraciones deben realizarse con un grupo de cuatro o más personas para reducir la posibilidad de desorientación. Se espera que todos los grupos de exploración se adhieran a las rutas establecidas; las desviaciones de las mismas deben ser aprobadas de antemano. Tras los eventos descritos en el ANEXO C, se han instalado sensores de movimiento en toda la red.

En caso de que el personal se pierda o se separe debajo de SCP-7900, se aconseja localizar un espacio cerrado o asegurar un punto de observación y esperar rescate. La producción de ruido excesivo es desaconsejable.

Todos los avances relacionados con SCP-7900 u otros fenómenos relacionados deben ser enviados al Departamento de Estudios Cetáceos.

AVISO: Los procedimientos de contención pueden estar obsoletos y han sido marcados para su revisión. Véase el ANEXO D.

DESCRIPCIÓN: SCP-7900 es Notre Dame de la Mer, un monasterio fundado en el año 1208 E. C. y el centro de numerosos fenómenos anómalos. SCP-7900 se encuentra a siete kilómetros de la costa de Normandía, Francia, en un islote rocoso rodeado de aguas profundas.

SCP-7900 fue construido originalmente como guarnición militar para el ejército francés en la Primera Guerra de los Cien Años (1159-1259) debido a su ubicación estratégica, pero poco después se convirtió en una institución católica. Debido a su aislamiento del continente, SCP-7900 se ganó rápidamente la reputación de lugar de curación espiritual e introspección. El acceso a SCP-7900 era difícil, por lo que sólo estaba poblado por un pequeño asentamiento de devotos que vivían permanentemente en el islote.

El conocimiento público de SCP-7900 disminuyó lentamente con el tiempo debido a su lejanía y a la soledad autoimpuesta de su población. En algún punto, el contacto entre los residentes de SCP-7900 y el continente europeo se cortó por completo y la religión practicada en el islote cambió significativamente del catolicismo. SCP-7900 acabó convirtiéndose en poco más que un mito hacia el año 1300 y, desde entonces, ha sido eliminado por completo de los registros públicos tras su descubrimiento por la Fundación a finales del siglo XIX.

Fig 1.2: Notre Dame de la Mer, artista desconocido.

En un punto indeterminado (probablemente a finales del siglo XII, según el estilo arquitectónico), se construyó una catedral románica, similar a otras catedrales de la época. A lo largo de los siguientes cien años, se hicieron varias adiciones a la estructura original, incluyendo un campanario, habitaciones y una cripta.

Mientras que el resto del continente avanzaba hacia estilos arquitectónicos góticos, las futuras adiciones de SCP-7900 eran estéticamente únicas, aunque de alcance limitado debido a los escasos recursos del islote. Sus diseños contrastan fuertemente con las catedrales del continente por su incorporación de formas fluidas, grandes reducciones de luz natural y un énfasis en el color azul.

Los tapices, murales y diseños de vitrales recuperados ponen un fuerte énfasis temático en la serenidad asociada al ahogamiento.

Un gran tímpano sobre la entrada de la catedral principal representa el ahogamiento masivo ritual de más de cincuenta personas. En el interior, los murales y los vitrales representan la muerte, purificación y eventual transmutación del alma tras el ahogamiento, a menudo acompañados de representaciones de vida marina, como cetáceos e híbridos humanos semiacuáticos. Un tapiz recuperado en la cripta retrata a un grupo de misioneros descubriendo una vasta cueva inundada que contiene un cadáver de ballena conservado.

Varias pesas de metal, que se presume fueron utilizadas para ayudar en el ahogamiento, fueron recuperadas dentro de las habitaciones de SCP-7900. Adherido a la pared detrás del altar de la catedral había un cráneo de ballena de una especie no identificada, visualmente similar al de la Ballena Gris.¹ Las mandíbulas inferiores fueron recuperadas en la cripta con cientos de nombres y fechas grabadas en su superficie, algunas tan recientes como la década de 1850.²

Restos fósiles amalgamados rodean el islote, lo que sugiere la presencia de un número sin precedentes de vida marina a lo largo de la historia de SCP-7900. En la actualidad, el islote está prácticamente desprovisto de vida.

En el momento del descubrimiento, SCP-7900 estaba abandonado. Desde entonces se ha convertido en un activo vital para los estudios culturales de la Fundación en la región, ayudando a la crónica de un período rico pero sombrío de la historia francesa.

Fig 1.3: Entrada a la red subterránea en el momento del descubrimiento.

ANEXO A: Debajo de SCP-7900 se encuentra una amplia red de túneles construidos en una fecha desconocida de la historia de SCP-7900. La red fue descubierta durante unas excavaciones arqueológicas alrededor de la base del islote. Los túneles aún no han sido explorados en su totalidad, pero los equipos de investigación han cartografiado más de 150 kilómetros hasta la fecha. Se estima que el tamaño total de la red oscila entre 600 y 1000 kilómetros. Gran parte de la red parece ser de origen natural, pero partes importantes han sido reforzadas con una intrincada y avanzada arquitectura.

A diferencia de las partes que se encuentran en la superficie, los materiales de construcción utilizados en los túneles son ajenos al islote, y consisten principalmente en una rara piedra de jabón blanca y hueso de ballena. Los refuerzos artificiales continúan de forma intermitente a unos 400 metros por debajo de la tierra, a pesar de la inviabilidad de tales proyectos de construcción dada la tecnología disponible en el momento del uso de SCP-7900.

Durante las exploraciones preliminares, se descubrió que la red posee un efecto anómalo que hace que los individuos tengan una probabilidad superior a la media de perderse dentro de los túneles, incluso cuando utilizan equipos de navegación avanzados. El personal rescatado declara sistemáticamente haberse perdido por medios no anómalos, como el mal funcionamiento del equipo, la desorientación o la actividad geológica inestable, pero los repetidos incidentes sugieren una interferencia anómala.

Este efecto fue notado cuando el Destacamento Especial MAMUT, un equipo de reconocimiento especializado en la exploración subterránea, dejó de emitir su señal de "todo despejado" durante más de tres horas mientras estaba debajo de SCP-7900. El equipo fue declarado desaparecido en acción tres días después de la pérdida de contacto, pero fue descubierto poco después por patrullas de rescate.

Fig 1.4: Caverna subterránea inundada.

Durante el interrogatorio, los miembros del equipo describieron que se habían desorientado tras intentar volver a la superficie por donde habían venido. Siguiendo el protocolo estándar, iniciaron una metódica exploración lateral hasta llegar a una cueva inundada (foto) que continuaba a una profundidad indiscernible.

Mientras ideaban un plan de rescate, varios miembros del equipo informaron de que habían oído vocalizaciones similares a cantos de ballena procedentes del agua. Una investigación más detallada no logró revelar una fuente, pero el equipo recuperó una colección de pesas de metal similares a los artefactos de la superficie. Las vocalizaciones fueron descritas como de intensidad creciente, amplificadas por las paredes de la cueva, hasta que el equipo se vio obligado a retirarse de la caverna.

El siguiente es un extracto de un testimonio del incidente por Rick Costellos, especialista jefe de demolición del DE-MAMUT:

Urchek y yo estábamos preparando los picos para un barrido de radar. La misión se había ido al diablo, así que íbamos a intentar encontrar un punto débil en la roca para realizar una explosión controlada, que despejaría el camino o al menos les alertaría de nuestra ubicación.

Tanner³ nos dice que bajemos un poco la ladera para ampliar el alcance de la imagen, ya que sólo tenemos el tiempo suficiente antes de que se agoten las baterías. Nos colocamos a unos 15 metros del resto del equipo, hacia el agua.

Entonces oigo algo—sonó como un alarido. Miro a Urchek y se encoge de hombros. Lo oigo de nuevo. Más fuerte, pero menos agudo. El eco de la cueva no me permite determinar la dirección de la fuente. Nos separamos, pensando que es un animal salvaje o tal vez una persona. Entonces Urchek grita, y lo veo caer hacia atrás por el rabillo del ojo. Me apresuro a acercarme. Está señalando el agua, diciendo que ha visto algo en ella. Una—una ballena, dice. Mirándole de reojo.

Le ayudo a levantarse y ambos buscamos movimiento. Nada. Volvemos a oír el ruido, que esta vez procede claramente del agua—un largo lamento, seguido de breves chasquidos y estallidos. Veo que Urchek se agita. Todavía está verde, así que le daré un poco de espacio. Vemos ondas en el agua y le digo a Urchek que vaya a buscar a Tanner. Él sale corriendo, con la cola entre las piernas. Pero yo no lo hice. No estaba asustado, no. ¿Por qué debería de estarlo? Sólo quería salvar mi alma.

Las fotografías de la caverna coinciden con las descripciones de una gruta divina que aparecen en los documentos recuperados de SCP-7900. Las exploraciones posteriores no han podido localizar la caverna.

ANEXO B: Dos meses después del incidente, Costellos fue reportado como ausente de su puesto en una anomalía no relacionada. Varios días después, un equipo de seguridad estacionado en SCP-7900 observó marcas de quemaduras en la entrada de la red subterránea, que parecían formar un rastro que se adentraba en el sistema. Se pidió a Emelie Tanner y a otros miembros del DE-MAMUT que investigaran, dada su experiencia previa con la anomalía.

El siguiente es un testimonio de Emelie Tanner sobre el incidente:

Conozco a Rick desde hace mucho tiempo. Fue uno de los seis miembros fundadores de Mamut. El único que sobrevivió a ese pozo de gravedad en Mystery Spot— me salvó la vida en más de una ocasión. Lo que trato de decir es que es un tipo duro.

Veinte años en este trabajo y nunca he visto a alguien desmoronarse como lo hizo Rick.

Verás, llevaba un tiempo actuando de forma extraña. Tardaba demasiado en responder a las preguntas, a veces no respondía en absoluto. Dada su posición en el equipo, imaginé que podría herir a alguien o a sí mismo.

Estábamos realizando un trabajo en Brasil, así que supuse que era malaria o algo por el estilo. Le pedí que se quedara en el campamento y le dije que esperara allí hasta que los médicos pudieran volar desde São Paulo antes de manipular más dinamita. Estuvimos fuera unas 12 horas. Cuando volvimos, ya no estaba. Simplemente se levantó y se fue, se llevó sus cosas pero nada más.

Buscamos por la zona y no encontramos nada. Lo descartamos como otra baja de la profesión. Es duro, pero te acostumbras a eso aquí. Estábamos escribiendo el informe cuando ustedes llamaron. Dijeron que habían encontrado algo en 7900, y que nos necesitaban.

Estábamos allí al día siguiente. Y antes de que preguntes, seguimos las marcas de quemaduras. Claro, la idea de una trampa cruzó mi mente, pero pensé que era mejor que perderse como la última vez. Además, estábamos armados hasta los dientes y teníamos estatus provisional de Equipo de Fuego. No éramos precisamente un blanco fácil.

Tardamos media hora de túneles sinuosos y bajorrelieves de color blanco perla en encontrar el final del sendero, justo en la boca de la caverna inundada.

Enciendo mi linterna de largo alcance y veo a Rick sentado en la puta orilla del agua. Dios mío, si lo hubieras visto. Sus ojos estaban lechosos, y no respondía. Noté sus piernas de la rodilla para abajo sumergidas en el agua. Cuando lo sacamos vi que la piel se estaba pudriendo del hueso, no sé cuánto tiempo debió estar sentado allí para que eso sucediera.

En su mano había una bengala de emergencia consumida, sin duda la que utilizó para hacer el camino. Sus ropas estaban raídas y su aspecto era demacrado. Le hicimos un rápido chequeo médico, pero como sólo teníamos suministros básicos a mano no pudimos hacer mucho por él. Le dije a mi equipo que lo llevaran a la superficie— no me gustaban sus probabilidades de sobrevivir, y aunque pudiéramos salvarle la vida, nunca volvería a caminar. Pero me sentí aliviada de que no muriera solo allí abajo.

Mientras mi equipo subía por el túnel, eché un último vistazo a la piscina. Sólo una comprobación superficial, como he hecho un millón de veces antes.

Fue entonces cuando me encontré con un ángel.

Las marcas de quemaduras hechas por Costellos sirvieron para trazar un camino fiable hacia la caverna inundada, aparentemente sorteando la inestable topología de la red. Un examen de la piscina reveló evidencias de formas de vida que habitaban el agua.

Una misión acuática confirmó la presencia de al menos un gran organismo marino, recientemente fallecido y en buen estado. Se determinó que la causa de la muerte era inanición. El organismo presentaba grandes similitudes visuales con la familia Eschrichtiidae (ballena gris), con varias excepciones importantes: ojos malformados, hundidos en el cráneo y cubiertos de piel; ausencia total de espiráculos o aparato respiratorio; ausencia de barbas, aunque los daños en la boca sugieren que fueron extraídas después del nacimiento; dos brazos, pálidos y huesudos, que se extienden desde ambos lados del torso y terminan en manos de aspecto humano.

Debido a su tamaño, su extracción de la caverna se ha considerado improbable, y todos los exámenes tuvieron que ser realizados por equipos preparados para buceo sostenido. La especie del espécimen ha sido bautizada como Apóstol Gris (Eschrichtius apostoli) a instancias de la jefa de investigación de SCP-7900, Julia Ngo.

El siguiente memorándum fue enviado por la Dra. Ngo a todo el personal de investigación asignado a SCP-7900:

Nada más ver el espécimen, quedaba claro que estábamos ante algo mucho más grande de lo que habíamos empezado.

Todos ustedes han sido informados de la historia de este lugar. Han visto los dispositivos utilizados para tortura. Los murales y su arte macabro. Si son como yo, se han parado en los acantilados y han mirado al mar como lo han hecho innumerables personas a lo largo de los milenios. ¿Qué podrían ver ellos que nosotros no podemos? ¿Qué podría hacerles sonreír hacia una muerte fría y solitaria?

Sus compañeros han hablado sin duda de manía y adoctrinamiento. Han descartado todo lo que ha ocurrido aquí como un recordatorio aleccionador de los peligros del pensamiento de culto. Llevamos medio siglo estudiando Notre Dame de la Mer. Te dirán que no hay nada que encontrar. Se equivocan.

Lo que encontramos en el Pozo del Diablo es más que un añadido a esta página. Es la clave de todo. Los brazos a ambos lados de la ballena no son similares a los humanos— son humanos. Son una coincidencia genética casi perfecta, exceptuando el tamaño. Y tenemos razones para creer que hay más. La cueva continúa más allá de los límites de nuestros reflectores. Hay más allí abajo. Los testimonios sugieren especímenes vivos, y tengo la intención de encontrarlos.

Una pequeña fuerza expedicionaria, liderada por la Dra. Ngo, fue enviada para explorar las partes sumergidas de la red de cuevas y determinar la presencia de organismos vivos. La exploración está en curso.

ANEXO C: Cuando la unidad de la Dra. Ngo no informó de sus hallazgos a la hora establecida, se organizaron equipos adicionales para el rescate. Creyendo que los túneles sumergidos poseían propiedades anómalas similares a las del resto de la red, las exploraciones posteriores se llevarían a cabo meticulosamente. Se realizaron amplios esfuerzos de terraformación para garantizar que no se rompiera la línea de visión entre los miembros del equipo.

Esto demostró ser eficaz, ya que los equipos de exploración descubrieron en pocos días grandes cantidades de restos arqueológicos dentro de cámaras selladas. Los objetos recuperados se asemejaban a los artefactos recuperados en la superficie, pero con un mayor grado de habilidad técnica. Casi todas las obras de arte representaban únicamente cetáceos.

Fig 1.5: Fisura marina encontrada.

Con frecuencia se encontraron restos esqueléticos en condiciones casi perfectas, muchos de los cuales poseían torsos superiores similares a los humanos fusionados con espinas inferiores alargadas que terminaban en aletas conservadas. Los restos se mezclaban con frecuencia con esqueletos de cetáceos más grandes, a menudo congregados en la región del estómago.

Al quinto día de exploración, los equipos de demolición descubrieron una cámara inusualmente grande, semejante a una fisura en la tierra, y que se extendía hacia abajo a una distancia indeterminada (foto). Mientras deliberaban sobre el curso de acción, los miembros de la tripulación reportaron haber escuchado cantos de ballena que provenían del fondo de la sima.

El supervisor Lee Dupont describe los siguientes momentos:

Estoy mirando hacia abajo y me digo 'no bajes, no bajes, no hay nada ahí abajo'. No es mi misión, no es mi problema, ¿verdad? Quiero decir, ¿cuándo ha pasado algo bueno cuando hurgas donde no te llaman?

Pero esa es la cuestión, ¿no? Me llamaban. Me querían allí. Eso es lo que ustedes siguen entendiendo mal. Esto no es otro culto a la muerte, no es otro Algadda. Es nuestro maldito boleto de salida. Es una forma de salir de todo este condenado y desastroso mundo en el que estamos.

No mataron a Ngo y a su equipo. ¿Quieres saber cómo lo sé? Porque ellos me lo dijeron. Tienen una manera de hacer eso… comunicarte algo en un instante. Es difícil de articular, pero después de que sucede tu solo… sabes lo que querían que supieras. Como despertar de un sueño. Eché una mirada allí abajo. Pasó en un instante.

Mi equipo protestó ante la idea de bajar, pero entonces también lo vieron. Oyeron el canto de la sirena. Empezamos con miedo a la oscuridad. Pero entonces crecemos. Descorremos la cortina y descubrimos que no había nada que temer en primer lugar. Evolucionamos. Y mi evolución fue en esa cueva.

No recuerdo todo lo que vi allí. Fue como un sueño, no puedo recordar los detalles. Pero nunca olvidaré las caras. Horrorosas, momificadas, asustadas. Millones de ellas, muriendo de hambre en ese pozo. Nada que comer después de que los apóstoles murieron y los ahogamientos cesaron. Veo los rostros de los devotos, a los que el agua dio nueva vida y nueva sangre. Vi a Ngo, en la dicha de su nueva inmortalidad. Vi a mi equipo, gritando al aceptar la bendición de Dios. Vi a Rick, Tanner y Urchek. Me vi a mí mismo, desde la distancia.

Pero lo más vívido de todo es que vi a Dios. Mi Dios, observando desde arriba a través de las grietas de la roca. Un ojo de ballena, azul como zafiro, y dejé que su canción me limpiara y me hiciera nacer de nuevo. Él tiene esperanzas en nosotros. Herederos de su Diluvio.

Hace tanto tiempo que no ve la superficie. No puedo esperar.

Lee Dupont fue encontrado por el personal de rescate horas después. Los otros seis miembros del equipo asignado a Dupont han sido declarados desaparecidos en acción. Los intentos posteriores de localizar la fisura descrita en sus testimonios han fracasado, probablemente debido a interferencias anómalas.

La estructura esquelética de Dupont comenzó a transformarse a la mañana siguiente, y ha sido colocado en un entorno acuático presurizado para reducir el dolor y observar el alcance de los cambios corporales y mentales. El Departamento de Estudios Cetáceos ha sido formado para documentar este y otros fenómenos relacionados.

ANEXO D: Expediciones recientes han descubierto la fisura submarina mediante esfuerzos de demolición. Sin embargo, las investigaciones dentro de la cámara no encontraron signos de los humanoides ni del gigantesco cetáceo descrito por Dupont. Las marcas en la roca implican la presencia de un gran número de organismos—ninguno de los cuales estaba presente.

Al mismo tiempo, los sensores de movimiento situados a 400, 317, 288 y 199 metros fueron activados por fuerzas desconocidas. Se descartó un mal funcionamiento técnico generalizado y la seguridad del sitio declaró una emergencia de Clase-Ekhi. Por orden del Jefe de Seguridad Sebastian Banks, la entrada a la red subterránea de SCP-7900 fue derrumbada con una explosión controlada, sellando el sistema y evitando una posible brecha de contención.

Banks relató lo siguiente durante su informe:

Quieres saber sobre el derrumbe. De eso se trata, ¿verdad? ¿Quieres saber por qué ordené a mis hombres que enterrasen los últimos seis meses de mi trabajo en tres mil toneladas de roca sólida?

Algo activó los sensores. Y rápido, también. Demasiado rápido para ser una sola entidad. Demonios, demasiado rápido para ser un grupo tampoco. Esos túneles son estrechos, es imposible que alguien pueda subir doscientos metros en menos de un minuto.

A menos que sea agua. Tiene que serlo.

Es una maldita inundación, subiendo desde el abismo. El Diluvio, ¿verdad? ¿Así fue como lo llamó Dupont? Sí, escuché la cinta. Estaba mal de la cabeza, pero tal vez dio con algo. Encontramos algo terrible y asombroso y hermoso ahí abajo. Ahora luchamos contra ello porque estamos asustados. Pero dale un poco de tiempo. Tal vez nos toque el premio gordo. Quién sabe dónde estaremos en diez, veinte años.

Como sea. Ya se acabó, esa cueva es hermética. Nada saldrá en mil años.

Pero todo lo que tenemos es tiempo, y el agua es paciente.