Ítem #: SCP-6593
Clasificación del Objeto: Seguro
SCP-6593 en su lugar de descubrimiento.
Procedimientos Especiales de Contención: SCP-6593 ha sido reubicado en la cafetería del Sitio-322. SCP-6593 puede ser utilizado por todo el personal del sitio, independientemente de su rango. Se aconseja avisar al personal cercano de que SCP-6593 estará en uso.
Descripción: SCP-6593 es una máquina expendedora estándar que acepta billetes y monedas de los Estados Unidos. SCP-6593 contiene barras de caramelo, bolsas de porciones individuales de papas fritas y pretzels, y una variedad de bebidas carbonatadas. Si un artículo es comprado, SCP-6593 se reabastecerá anómalamente al día siguiente. Todos los esfuerzos por observar este proceso han fracasado.
SCP-6593 es consciente, inteligente y capaz de hablar en inglés con una voz masculina muy modulada. Sólo mostrará estos rasgos cuando un cliente se encuentre a menos de 0,2 - 0,5 metros del objeto y permanezca en esta zona durante más de cinco segundos. Si se cumplen estos requisitos, SCP-6593 conversará con el posible cliente. Los mecanismos internos de SCP-6593 no difieren de las instancias no anómalas del mismo modelo de máquina — se desconoce cuándo o cómo se manifestaron estas propiedades por primera vez.
SCP-6593 obtiene gratificación sexual cuando un sujeto examina los artículos, introduce monedas y/o selecciona el artículo especificado, y suele pronunciar frases sexualmente explícitas sobre sí mismo o sobre el cliente y solicitar que se realicen las acciones mencionadas.
Debido a la capacidad de SCP-6593 de auto-reabastecerse, el Director del Sitio-322, Paul Lague, ha permitido que SCP-6593 sea colocado en el patio de comidas del Sitio bajo la supervisión del Programa de Integración como una medida de ahorro y para obtener una amplia gama de investigaciones de comportamiento sobre SCP-6593.
Anexo 6593.1: Transcripción de Evento
El 5 de julio de 2022, el Doctor Anthony Coix intentó utilizar SCP-6593.
TRANSCRIPTCIÓN
«INICIO DEL REGISTRO»
(Coix se acerca a SCP-6593 y comienza a examinar los artículos que contiene.)
SCP-6593: ¿Te gusta lo que ves, muchachote?
Nota: Desde el internamiento de SCP-6593 en la cafetería, el personal del Sitio desarrolló una estrategia de ignorar las insinuaciones de SCP-6593. Esto pareció exacerbar la actividad y el placer sexual de SCP-6593.
SCP-6593: Sí… mira a través de mi cristal. Soy una puta sucia mostrándote lo que hay dentro de mí.
(Coix sigue mirando los artículos. Parece estar indeciso sobre qué comprar.)
SCP-6593: Joder, me haces querer dispensar algo con tantas ganas. Por favor, dame una moneda.
(Coix sigue revisando los artículos disponibles durante otros cinco minutos. SCP-6593 se excita cada vez más por el tiempo transcurrido.)
SCP-6593: Por favor. Por favor, sólo una moneda. Sólo una. He sido tan buena. Soy una zorra. Quiero que compres algo de mí.
(Coix decide comprar un paquete de papas fritas Lay's. Saca cuatro monedas de 25 centavos de su bolsillo.)
(SCP-6593 emite un fuerte gemido.)
SCP-6593: Joder, sí. Mete esas monedas. Ponlas dentro de mí. Quiero sentirlas caer en el clasificador.
(Coix deposita las monedas de 25 centavos y vuelve a mirar la máquina en busca del número correspondiente.)
SCP-6593: Oh, joder, sí. Presiona mis botones. Presiónalos fuerte. Ya casi estoy.
(Coix presiona el primer botón.)
SCP-6593: ¡MÁS DURO!
(Coix presiona los tres últimos botones muy rápidamente. Está claro que se siente incómodo.)
SCP-6593: Oooh. Oh, mierda.
(Las luces internas de SCP-6593 comienzan a parpadear rápidamente. La máquina se eleva repentinamente del suelo y vuelve a caer. Todos los alimentos y bebidas que SCP-6593 tenía almacenados caen en la ranura de recuperación. SCP-6593 comienza a respirar pesadamente.)
SCP-6593: Oh, joder. Joder. Eso no ha pasado desde hace un tiempo.
«FIN DEL REGISTRO»
Coix sacó una gran caja de cartón de su despacho, recogió todos los artículos y salió rápidamente de la cafetería.
Cuando se corrió la voz de este acontecimiento, el personal en sus descansos para comer intentaba llevar a SCP-6593 al orgasmo para recibir refrigerios gratuitos. Se han desarrollado múltiples estrategias, como hacer tintinear las monedas durante el proceso de compra o mantener pulsados los botones del teclado durante más tiempo del necesario, pero la más exitosa ha resultado ser la creada por el Doctor Coix.