Karcista Halyna Ieva
El Azote del Hierro, la Madre que Exige los Dedos de los Pies12, La Carne Que Comía3, Subversión de las Expectativas Mekhánicas, La Hereje Fiel
Resumen
De todos los juguetes enfermizos de los Arcontes, quizás ninguno se pueda comparar con la tragedia de la Karcista Halyna Ieva, líder de los Nälkä que conquistó lo que hoy es el Irán moderno. Oh Gran Jalakåra, ¡qué grandioso fue su Halkost!45 Se decía que ella misma comandaba setenta y dos creaciones retorcidas de carne vil, leales sólo a Ieva y al propio Gran Karcista, mientras surcaba Asia Menor desde Mileto hasta Troya durante la Gran Guerra de la Carne y el Bronce.
Mencionar el nombre de Ieva es tabú entre los Devotos, que temen que los persiga después67. Oh, Maldita, ¿por qué vuelves a caminar entre nosotros?
Ilustración
Un artefacto griego que representa a Halyna Ieva. Se cree que la adoraban y la temían como Escila, una de las dos bestias míticas que impedían los viajes del Hermano Odiseo.
Conocimiento
Características: La propia Ieva se parece a una mujer humana de ascendencia medio-oriental, con pelo negro cuervo y piel oscura. Sin embargo, de la cintura para abajo, Ieva ya no se parece a nada de la naturaleza humana. Donde sus piernas deberían estar, en su lugar yace una masa retorcida de tentáculos ennegrecidos tumorales. Como los brazos de un pulpo, estos apéndices son prensiles y diestros.8
Como es de esperar de una Karcista, Ieva es capaz del poderoso lihakut'ak, el arte de la manipulación de la carne sárkica. Usándolo, puede causar un rápido crecimiento de cualquier vida que desee. Sus heridas se cierran automáticamente, su mirada instiga el crecimiento de tumores en la carne de otros, su aliento propaga infecciones, y, quizás lo más importante, su voz puede controlar su halkost, un ejército de bestias de carne descerebradas talladas de los restos de sus enemigos caídos. Esta combinación mortal de infección rápida y crecimiento de tumores en sus enemigos, junto con su enjambre de abominaciones, hace que la supervivencia sea escasa para aquellos que atraen la ira de Ieva.
Naturaleza: Durante su infame marcha de la muerte a través de Asia Menor, la Karcista Ieva demostró ser una líder intrépida y una combatiente feroz, al liderar su horda desde las primeras líneas. Con frecuencia no perdonaba a nadie, llevando a los soldados de su conquista a su halkost, después de lo cual debían pagar un precio de carne. Tales pagos generalmente toman la forma de los dedos de los pies, haciendo de los humanos su presa preferida.910
Historia y Grupos Asociados: Escritos y artefactos que datan del colapso de la Edad de Bronce tardía sugieren que una mujer Nälkä lideró un ejército de demonios delirantes, derribando las antiguas ciudades de Mileto y Troya en lo que hoy en día es Turquía. Sin embargo, el ejército fue detenido mientras intentaba cruzar los Dardanelos en ruta a Galípoli. Devotos seguidores de Wan emboscaron su lenta marcha de la muerte, lanzando nafta y disparando armas de los dioses. En su intento de avanzar, el halkost de Ieva fue completamente destrozado, sus flotas de abominaciones hundidas por máquinas de guerra más grandes que el Coloso de Rodas,11 llevándose a su Karcista con ellos. Ieva fue declarada perdida, otra víctima del conflicto en curso. Testigos reportan que Ieva tejió un capullo de carne alrededor de sí misma, envolviéndose completamente antes de sumergirse en las aguas. Los intentos de probar que había muerto han resultado infructuosos, debido a que no hubo nadie dispuesto a acercarse a su capullo.12
A los seguidores de Ieva les arrancaban los pies o las piernas por la fuerza, típicamente por la propia Karcista, y posteriormente eran maldecidos por magia de carne con los reemplazos adecuados. Ejemplos de extremidades de reemplazo han incluido: manos humanas, grandes tumores con forma anormal, sacos de líquido capaces de crear pseudópodos, protuberancias óseas en forma de garrote, tentáculos, un solo pie humano grande con todos los dedos del pie extraídos, y largas trenzas de pelo negro que se retuercen con la forma de una extremidad humana.
Acercamiento: Viendo que la Dama Ieva es sumamente hostil, el conflicto es inevitable. Instamos a todos y cada uno de los seres humanos a buscar refugio. Actualmente, el Hermano Ganimedes aboga por el permiso para usar los Caminos como medio de escape, pero el consenso actual es que representa un riesgo demasiado grande para la propia Biblioteca.
Entiendan que decimos esto con un gran pesar, incluso uno mayor, porque odiamos perder a nuestros compañeros amantes de los libros; sin embargo, no se ha demostrado que Ieva tenga un pensamiento racional, y no se puede permitir que una entidad que puede obligar a Su Santidad Bumaro a retroceder empañe estos gloriosos salones. Por lo tanto, proponemos un método alternativo de escape: llevar con usted una pequeña bolsita con un surtido de dedos de los pies1314. Debido al amor de Ieva por esos apéndices, actúa como cebo para que sus abominaciones vayan tras ellos mientras tú huyes por seguridad. De los cientos de entidades que han usado esta táctica, incluso la bastante lenta Aurora Que Desea Cítricos ha logrado escapar de su Halkost.
Otros Detalles: Desde hace poco, Ieva ha vuelto, trayendo peste y repugnancia a cada paso.1516 Actualmente, la Mano y los Devotos están trabajando juntos para frenar, o al menos impedir, su progreso. Representando a Su Santidad Bumaro, líder de la Iglesia Rota, está Alabastro Stahlsbeird, un taumaturgo especializado en la manipulación del metal.1718 Representando a la Mano y todas sus ramas está Ganimedes, un lich que enseña magia a los magos principiantes. Con suerte, esperamos poder convencer a los Carceleros e incluso a los Quemalibros de que dejen de lado sus enemistades con nosotros para contrarrestar a este enemigo indomable, pero sólo el tiempo lo dirá.
Observaciones e Historias
Duda
La pregunta sigue siendo: ¿dónde termina la verdad y comienza la leyenda? Es imposible determinar si su marcha de la muerte fue tan aterradora debido a su genio táctico y su destreza combativa o por pura suerte. Siempre parecía atacar cuando los oponentes estaban más descuidados, haciendo que algunos sospecharan que sus habilidades de combate habían sido infladas artificialmente por sus enemigos griegos que se avergonzaban de sus pérdidas.21
Además, su actual halkost no alcanza el tamaño del descrito en la leyenda, lo que significa que puede que no sea tan difícil de controlar como indican las epopeyas. Dicho esto, luchar contra ella es seguro que es una misión suicida y como tal, todavía abogamos por buscar la seguridad hasta que nuestras fuerzas conjuntas puedan detener su progreso.
Por último, Ieva afirma que sus acciones se deben al abuso infantil, pero no hay registros que muestren que Ieva haya sido severamente maltratada de esta manera, salvo el típico tratamiento de esclava que sufrió bajo los Daeva. Si esto actúa como un medio para justificar su conquista, o fue encubierto en una campaña de desprestigio de los Devotos, está por verse.2223